El sistema
antifuga eléctrico
para caracoles es totalmente efectivo para
individuos adultos y el más limpio, siempre que se instale correctamente. Además, evita la
entrada de pequeños
animales como babosas, reptiles, roedores, etc. En cuanto a los alevines,
también suele dar buenos resultados pero su instalación es más laboriosa y el
electrificador debe ser de baja potencia o colocar un atenuador
ATN-1
para alimentar la valla de los pequeños, usando el mismo electrificador de
los adultos u otro distinto, pudiendo regular la tensión desde 0 hasta el
voltaje deseado. Este sistema sólo sirve para pequeños recintos de unos 50
metros lineales y
solamente es recomendado su uso si no se dispone de otros medios.
Para construir un sistema antifuga necesitamos un electrificador (pastor
eléctrico, boyero, guardián, vaquero, etc., según se denomine en cada país
o región) y una cerca diseñada especialmente para
estos animales.
El electrificador debe ser un aparato normalizado como los usados en
ganadería, que genera impulsos cortos de milisegundos a intervalos de 1 segundo
aproximadamente y a una tensión entre 5.000 y 10.000 V. y de muy baja
intensidad.
Conviene que la salida de corriente sea de muy baja impedancia, ya que al alimentar una cerca
húmeda la caída de tensión en el bobinado de salida
del aparato es
considerable, por lo que adaptamos cualquier modelo del catálogo para este
fin. En instalaciones al aire libre puede ser necesario usar aparatos que
suministren considerable energía (1 Julio P. Ej.) aunque por lo general
es suficiente con 150 mili julios e incluso bastante menos. El problema
puede surgir cuando la cinta
C-40
,
usada como cerca, se empapa de agua permanentemente y el aparato no
suministra suficiente energía para superar las perdidas. Para evitarlo se puede proteger con una
especie de tejadillo que cada cual puede ingeniarse o comprar en el
mercado, una solución puede ser colocar
sobre la cinta canalones de plástico invertidos. En caso de que la instalación esté protegida de
la lluvia,
nos queda el problema de los aspersores, que se pueden intentar colocar de forma que no incidan
directamente sobre ella.
En zonas propensas a cortes de suministro eléctrico se debe usar un
aparato alimentado por pilas o batería, bien sea recargada con energía de
la red o con luz solar. Pensar que a la hora de una tormenta es cuando nos
podemos quedar sin suministro eléctrico y también cuando la actividad del
caracol se multiplica. Entre los modelos más recomendados están el
HB
,
HCR
,
HBR
,
HSS-M
y
HCP
.
El modelo
HB
acoplado a una batería
B-36
ó
B-46
y a un
cargador
CR-20/CP
,
proporciona óptimos resultados por un precio módico. Además, al disponer
de tres escalas de potencia se puede seleccionar en cada momento la más
conveniente. Funciona entre 50 y 200 horas en caso de corte eléctrico,
dependiendo de la potencia seleccionada y del tipo de batería. En caso de
no disponer de electricidad el cargador puede sustituirse por una placa
solar. Si la instalación requiere más de un aparato la alimentación puede
ser común. También puede usar una batería tipo automóvil y un panel solar
que suministre la energía necesaria, o disponer de 2 baterías y un
cargador convencional e intercambiarlas cada unos 15 días.
Fig. 1
Detalle de cajón de madera con borde de chapa metálica y un hilo
electrificado.
La cerca no debe colocarse a demasiada altura del suelo (30 ó 40 cm.) por
si los caracoles se caen al recibir la descarga que no se rompan el
caparazón. Hay muchas maneras de construirla, lo mínimo es con dos
alambres paralelos, al menos uno de ellos aislado, separados algo menos de 1
centímetro y conectando uno al vivo y otro a la masa (tierra) del electrificador;
cuando el caracol los toque cerrará el circuito y recibirá la descarga. Si
dispusiéramos de un cajón metálico bastaría con darle masa (conectar el terminal de
tierra) a la
estructura y colocar 1 ó 2 hilos electrificados por la parte superior interna.
Fig. 2
Detalle de conexión eléctrica de la cinta C-40 y
de amarre con hilo sobre
aislador AC-2.
Nuestra
cinta C-40.
Cada cual puede ingeniarse una cerca a su
manera, bien sea con alambres paralelos o de cualquier otra forma pero lo
mas práctico es usar cintas especiales para este fin.
Existen en el
mercado, principalmente en Francia, cintas con láminas de
acero inoxidable, pero su precio es demasiado elevado y los conductores
crean problemas por estar demasiado próximos. Nosotros hemos diseñado una
cinta robusta, económica, duradera y eficaz. Tiene 4 centímetros de ancho
y está compuesta por 80 monofilamentos de polietileno con tratamiento
contra rayos ultravioleta y 8 hilos conductores de acero inoxidable de
0,40 milímetros de diámetro formando 4 líneas, cada una de 2 hilos y separadas
entre si un centímetro. Esta cinta hay que colocarla sobre una
superficie o soporte aislante. Lo mejor es coserla con hilo de nylon sobre
una rejilla o tela plástica como la de sombra, pero si se coloca sobre madera,
cemento,
hierro, etc., es necesario usar el aislador
AC-2
o similar,
de forma que los conductores sólo se pongan en cortocircuito cuando un
caracol intente pasar sobre ellos. Se deberá unir (ver figura 2) la 1ª línea
conductora con la 3ª y la 2ª con la 4ª, de esta forma tendremos
dos cables de alimentación, uno lo conectaremos a la salida de línea del
electrificador y el otro a la de toma de tierra. No conecte la cinta a una
batería o fuente de corriente continua, pues, además de que
los resultados
son dudosos, al estar en un ambiente húmedo termina deteriorándose por efecto
electrolítico.
Este
sistema, bien instalado, constituye una barrera infranqueable, cada línea
está a un potencial distinto de la más próxima de forma que cuando un
caracol se acerque a dos de ellas recibirá la descarga y retrocederá.
Un
electrificador puede alimentar cientos de metros de cinta, incluso más de
mil
si se mantiene seca, ya sea en un solo circuito o ensamblando varios
compartimentos.
Es
conveniente limpiar la cinta con cierta frecuencia, mejor con agua a
presión, y es normal que a veces se produzcan descargas eléctricas entre
las distintas líneas debido a la suciedad depositada, a insectos o babosas
que se quedan pegadas, o a la misma baba del caracol; pero no por eso
pierde eficacia a no ser que el cortocircuito sea total, pues la energía
del electrificador debe ser sobrada.
La unión entre varios
circuitos (cajones/hamacas) debe hacerse de forma correcta. El
cable que va a la salida de tierra del electrificador puede ser cualquier
conductor o simple alambre desnudo, aéreo o enterrado, e incluso la
conexión puede hacerse por picas de toma de tierra; pero el de la salida
de línea debe ir aéreo con sus correspondientes aisladores o bien
subterráneo usando cable de alto aislamiento como el
C-50
.
(similar a los del encendido de los motores). Nunca utilizar cables
normales bajo tierra, pegados a estructuras metálicas, muros, etc. Y de
ninguna manera colocar el positivo y negativo juntos (vivo y neutro
formando parte de la misma manguera) a no ser que se use conductor con
aislamiento superior a 10.000 voltios;
los cables usados en instalaciones eléctricas no superan los 1000 voltios
de aislamiento. Es conveniente unir el final de la
cinta con el principio, pero no necesario; si se une, poner cuidado en no
invertir el orden de las líneas conductoras, pues podría cortocircuitarse
y perder toda la eficacia.
La
cinta se puede colocar en sentido vertical u horizontal. Si se hace en
horizontal (volando) no hace falta que esté sobre una superficie
aislante y puede graparse un lateral sobre una tabla de madera u otro
material, el otro lateral deberá reforzarse, por ejemplo, con una cuerda de
nylon tensada en los extremos o con soportes intermedios para que no se
caiga.
En
vertical, lo mejor es coserla sobre una tela tipo mosquitera,
sombra, etc., o usar el aislador AC-2. Si se grapa sobre una superficie
aislante tener cuidado en no cortocircuitar las líneas conductoras ni
clavar entre ellas, y usar grapas inoxidables.
Para
comprobar la tensión entre las líneas conductoras es conveniente disponer
de un voltímetro especial
A-19
y vigilar que no baje de 1000 voltios, pero, con un poco de práctica y
disponiendo de un destornillador con mango aislado, se puede hacer puente
entre los hilos conductores hasta que salte arco; cada milímetro de
longitud de la chispa equivale a unos 1000 voltios. Otro comprobador más económico que
también
sirve, es el
CL
.
Esquema
teórico para adultos y alevines. Para pequeños no más de 50 m. con cinta
A-15
Detalle de conexión
de varias mesas sin cortar la cinta.
El
aislador AC-2
.
Hemos explicado que una buena forma de colocar la cinta
C-40
es sobre
una
malla aislante plástica, pero esto no siempre es conveniente ni posible.
Como en el mercado mundial no encontramos un aislador adecuado para
instalarla sobre superficies más o menos conductoras, diseñamos el
AC-2,
que, como todo, será imitado y perfeccionado. Quisiéramos que la
instalación resultase más sencilla pero nos encontramos con la dificultad
de no poder incorporar ningún cierre plástico, ya que los
caracoles los aprovecharían para huir. Observando las figuras, se comprende
fácilmente la forma de amarre, éste puede hacerse con bridas plásticas o
con hilo de nylon. Además del hilo o las pequeñas bridas, debemos disponer
de una aguja curvada o una lezna de zapatero de punta curva. Estos
materiales los podemos suministrar, pero se pueden adquirir con facilidad
en el mercado ya que se usan para coser sacos, en trabajos de tapicería,
de cuero y cirugía animal.
Aislador AC-2 para
cinta C-40 y otros usos
.
Calentando una aguja normal se puede curvar. También se pueden usar los
hilos de la misma cinta para coserla al aislador o sobre malla, cortándola en
trozos suficientemente largos para poder atar y deshilándola, tarea muy
fácil. Al
instalarla procurar tensarla bien para que no quede ondulada.
La separación de 7 milímetros que marca el aislador entre la cinta y la
pared es necesaria para facilitar la ventilación y limpieza, y para que no
se acumule suciedad entre ambas que ocasionen cortocircuitos. Es obvio que
este sistema no sirve para los primeros días de vida del caracol, que, por
otro lado, tampoco se necesita.
Este aislador también puede emplearse como soporte de dos alambres para
ahuyentar aves y otros animales.
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Amarre con bridas.
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Cosiendo con aguja
curvada.
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Cosiendo con bridas de 2,5 X 80
mm.
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Cosiendo con hilo.
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Detalle de esquina,
los aisladores deben quedar a unos 3 centímetros del vértice.
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Cinta instalada sobre madera con
aisladores cada 30 cm. amarrados con tornillos de 3 X 10 mm.
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8 HCR,s electrificando
líneas de hamacas.
Instalaciones
de Cogaproca.
(Cooperativa gallega de
productores de caracol)
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Un HCR electrificando 20
hamacas en línea.
Instalaciones
de Cogaproca. Teléfono, 986 559 733.
(Cuenta con un centenar
de socios en Galicia)
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Cinta C-40 sobre malla
antifuga conectada a un electrificador rechazando los caracoles que
han burlado los volantes. (Explotaciones Rodrigrey)
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Malla antifuga reforzada con cinta C-40 para una protección más segura.
(Explotaciones Rodrigrey)
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Vista aérea de las Instalaciones
Rodrigrey en Ortigueira, A Coruña. Comercializa
alevines y reproductores de producción propia. Teléfonos 629 692 824 y
626 623 047. E-mail:
rodrigreygranas@yahoo.es
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En
l
inks/enlaces
, consultar:
Todo
sobre caracoles
NOTA:
La cinta C-40 puede usarse para ahuyentar aves como cigüeñas, palomas y
otras. También para impedir el paso de roedores, reptiles, etc.
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